La Liga del Desvarío Humano...
Pensar no está de más... escribir lo que pensamos, tampoco. Encontrar quién lea y discuta con nosotros, eso es otra historia...
marzo 31, 2005
Manifiesto
El mundo está sobre una escalera negra. Nadie sabe si sube o baja. Nadie sabe si rueda o rebota. No sabemos cuando vamos arriba y cuando abajo.Decía Mafalda que los sudamericanos éramos sub desarrollados porque estábamos de cabeza. Pero, ¿quién nos asegura que ese es el orden verdadero? ¿quién dice que en realidad arriba es lo correcto? ¿quién puede afirmar que en verdad arriba es realmente arriba?
No sabemos bien para qué llegamos a este mundo posado sobre una escalera negra. La incertidumbre nos determina, somos víctimas de un determinismo al que buscamos oponernos con teorías filosóficas sobre la evolución, el libre albedrío o la imposición de la moda. El determinismo nos ataca a modo de "planes de vida", tendencias de la moda o imposiciones sociales que consentimos por cumplir, por ser aceptados.
No sabemos bien para qué llegamos a este mundo posado sobre una escalera negra. La incertidumbre nos determina, somos víctimas de un determinismo al que buscamos oponernos con teorías filosóficas sobre la evolución, el libre albedrío o la imposición de la moda. El determinismo nos ataca a modo de "planes de vida", tendencias de la moda o imposiciones sociales que consentimos por cumplir, por ser aceptados.
Decía Zulypanta que hoy es imposible simplemente ser sin tener una etiqueta. Punkies, trasher, emos, electrónicos, anarkistas. Simples etiquetas para sentir que somos parte de algo sumidos en una sociedad que nos determina a carecer de expectativas, que nos castiga por cuestionar el orden, que nos limita para ser parte de ella.
Incluso las tribus urbanas que viven al soslayo de lo socialmente aceptado se ven en la obligación de aceptar el orden para contraponérsele y vivir así a su manera.
Incluso las tribus urbanas que viven al soslayo de lo socialmente aceptado se ven en la obligación de aceptar el orden para contraponérsele y vivir así a su manera.
En este contexto, los desequilibrios sociales acumulan descontento. Las masas han hablado en otros lugares de Latinoamérica y nosotros nos mantuvimos ajenos, nos informamos por TV. ¿Qué pasa cuando los medios analizan la violencia de los jóvenes, catalogándola de vandalismo o delincuencia? ¿Cuál de los supuestos líderes de opinión cuestiona entonces qué responsabilidad nos cabe para generar en nuestros jóvenes tal grado de descontento que deben destruir para sentirse escuchados, para sentir que son parte de algo?
Manifiesto que ya no creo en nada. Manifiesto que busco recuperar al hombre por el hombre, a la mujer por la mujer, a la persona por la persona. Manifiesto que creeré sólo cuando el respeto del otro como legítimo otro sea Ley Divina. Por ahora, sólo queda manifestar.
Manifiesto que ya no creo en nada. Manifiesto que busco recuperar al hombre por el hombre, a la mujer por la mujer, a la persona por la persona. Manifiesto que creeré sólo cuando el respeto del otro como legítimo otro sea Ley Divina. Por ahora, sólo queda manifestar.
marzo 30, 2005
Algo de cotidianidad
Pepe le Puf está durmiendo en la pieza de Zuly... ellas ya entraron a clases y Pepe vive todo el proceso de reincorporarse luego de un año de haber congelado... difícil tarea...
Angelito, en cambio, sigue siendo explotada en su trabajo, aunque ella diga lo contrario... los últimos 3 días ha trabajado mañana y tarde, como siempre... desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche, con una hora de colación a medio día... aún así, tiene insomnio... así que la pasamos a buscar por la noche para deambular por la vida...
Yo sigo en busca de trabajo... requiero uno con urgencia para poder buscar departamento e irnos con Angelito de una vez por todas... así se me quita la costumbre de vagar por las calles antofagastinas sin rumbo real buscando nada, sólo para no llegar a casa... la única que entiende eso es Pepe, porque a ella tampoco le gusta llegar a su casa...
Anoche fue una buena noche... entretenida... interesante... fuimos al Parque Brasil y nos paramos en la Glorieta con ínfulas de artistas callejeras... Angelito y Pepe bailaban... en realidad, Angelito bailaba y Pepe trataba de bailar... como es tan descordinada la pobre...
Yo recité la Poesía del Gato... blanco y rubio, tan monín... su rabo era así de gordo... se llamaba Pirulín... la Zuly no quizo cantar y mientras las otras dos la presionaban yo abogué por la necesidad de respetarla y de darle el tiempo necesario para hacer lo que quisiera hacer cuando lo quisiera... nuestro único espectador fue el cuidador de la Glorieta, que amablemente prendió las luces... creo que le caimos simpáticas... de todas formas, debe ser extraño ver a cuatro mujeres solas, muertas de la risa, dándoselas de artistas y sin ningún gramo de alcohol en el cuerpo... no es lo cotidiano... lo cotidiano sería que hubiésemos estado tomando escondidas en los arbustos en medio de la oscuridad, como la mayoría ahí... pero nosotras no somos cotidianas... y creo que de cierta forma, seguimos siendo La Tribu...
Mía
marzo 28, 2005
Encuentro algunas horas
Esta mañana me levanté triste. Ayer por la noche pasamos a buscar a Angelito a su trabajo y me preguntó a qué se debía eso de las Horas Perdidas. Y yo no pude explicarle. Así que me quedé en la noche pensando y la consecuencia es que me levanté triste esta mañana.
Todo dice relación con el espacio de tiempo que hay entre el jueves por la noche y el viernes a mediodía. Mientras el mundo celebraba Semana Santa con sus ritos de privación y reflexiones. Yo, en cambio, me di licencias que no suelo darme, a pesar de mi autodenominada personalidad casquivana, que generalmente son más palabras que acciones.
Hace unos días le dije a Pepe le Puf que no quería más revolcones en mi vida. Y es verdad, no los quiero. Es sólo que a veces los largos períodos de soledad te demuestran que son la única opción para descargar tensiones sexuales. Un tema puramente físico, que generalmente no me cuesta manejar cuando se trata de temas puramente físicos.
¿Pero que pasa cuando hay ciertas actitudes que traspasan lo corporal? El jueves, mientras Pedro Luis fue a dejar a Angelito a su casa y yo conversaba de política, mi acompañante se acordó de su papá que le decía "hijo, usted necesita a una mujer que cuando llegue la noche lo entienda, lo acompañe, le haga cariñitos". Luego él me dijo lo mismo, que yo necesitaba a alguien al que al final del día, o cuando fuese necesario, pudiese contarle esas cosas que nunca le cuento a nadie... "es más que sexo -dijo- se trata de compañía"... un cómplice, pensé, y al primero que tuve en mi cabeza fue a Cristobal (no es ese su nombre de verdad, pero pensemos que se llama así)... es que Cristobal podía hacer eso: no verme en tres meses y con una sola sonrisa reconstruir mi alma en un segundo... y Cristobal se quedó ahí, deambulando como un fantasma el resto de la noche... y me fui con mi acompañante a su casa con el único objetivo de borrar al fantasma... pero nunca puedo... y eso me pone triste...
Además, me parece poco correcto que una persona a quién recién vienes conociendo te desnude el alma de esa forma. No es justo, mucho menos sano... ¿o será que se me nota demasiado mi sensación de soledad extrema y eterna? Esto de saberme Mujer Sola ya se proyecta demasiado y está a simple vista... o bien, el brasileño con su cara sonriente era más perceptivo de lo que pensaba... o fue pura coincidencia mientras me engrupía... al final, el grupo igual le resutó un poco... de todas formas creo que en realidad más me lo engrupí yo...
Mía
marzo 27, 2005
Horas perdidas
Me siento abrumada por el aburrimiento... ¿en qué momento de mi existencia perdí la noción de que en un sábado por la noche se hace algo más que dormir, ver tele o escribir alguna cosa? Acabamos de dejar a Angelito en su casa, hace un par de horas... le dolía su cabecita loca y antes de dejarnos, estuvo un buen rato contando una película que a ella le gustó mucho...
Pepe le Puf anda en fuga. Dice que no quiere volver a su casa y la entiendo... a mi me pasa lo mismo, en especial los fines de semana... esta "Semana Santa" fue cualquier cosa menos espiritual para mí. Digo, si se acabara el mundo justo ahora, de seguro me voy al infierno por pecadora... pero como ya no tengo claro que es pecado o no (también se aplica a mí eso de la "moral acomodadiza"), creo que me queda alguna oportunidad...
Estuve el jueves en casa de Pedro Luis... él invitó al brasileño ese al que le estuve coqueteando mucho y que luego pidió mi teléfono... conversamos muchísimo y me pareció bien encontrar alguien con quien discutir puntos de vista políticos... aún cuando descubro cada día que soy una inculta y que nunca terminaré por aprender bien de que se trata todo eso... así como no entiendo de donde salió mi gen amante de la política...
En fin... luego de irme de la casa de Pedro Luis, cuando él se fue a acostar y nos dejó solos al brasileño y a mí (creo que tenía complejo de celestino), vienen mis horas perdidas... si alguien tiene tiempo, agradeceré me ayuden a buscar esas cinco o seis horas perdidas en mi vida, entre que salí de esa casa y volví a la mía... no es por que no recuerde (vuelvo a aplicar lo de la Amnesia temporal voluntaria) sino porque creo que fueron unas horas mal invertidas...
¿Recuerdan cuando escribí eso de la Mañana Después? Pues bien, esa mañana me sentía alegre, a pesar de que sabía que no podría repetir esa noche, por mutuo acuerdo... tras mis horas perdidas, no sé si volvería a repetir el incidente... no sé bien que fue, si la conversación previa, el despertar con ganas de salir corriendo o el acordarme de aquel al que dedico varias horas de mi día para escribir una cursi novela de amor, con el único objetivo de cerrar un capítulo que no sé bien por qué no logro cerrar...
El caso es que las horas perdidas ya se fueron y no logro capturarlas... recuerdo que la noche aquella que no puede ser repetida por mutuo acuerdo, me hizo redescubrir una yo que había hibernado por mucho tiempo, esa que mi amigo Alberto describía como "expeler energía sexual"... esa yo que me gusta mucho... tengo miedo que las horas perdidas vuelvan a dormirla... son tan extrañas mis reacciones, que cualquier cosa podría pasar...
marzo 26, 2005
marzo 23, 2005
Las Arañas
Angelito le teme a las arañas. Le aterrorizan tanto que pierde noción de su cuerpo y sólo imaginar un arácnido cerca de su cuerpo le hace perder el color y caer desmayada.
Es duro perder a ese punto la compostura producto de una araña. Ella asegura que vino a este mundo a otras cosas y no a matar insectos. Tuvo una discusión similar con su jefe, cuando a él se le subió uno de esos personajes al hombro y ella sólo grito y comenzó a escapar por los pasillos de la consulta donde trabaja. Claro, su jefe le pedía que sacara la araña de su hombro, algo asustado. Ella, aterrorizada, gritaba que estaba para ser secretaria y no para matar insectos... olvidó, claro está, que a las arañas les sobran 2 patas y les falta cuerpo para ser insectos...
Yo estuve pensando que mi angelito habría muerto de susto si me hubiese visto trabajando en el diario de Temuco, con la mano metida en un insectario lleno de arañas para hacer una nota sobre una exposición de arácnidos que visitaba la ciudad. ¿Qué cara habría puesto entonces? ¿qué pensará de mí si le muestro las fotos de mi mano con dos arañas pollito sobre ella?
Dejaré esas interrogantes para cuando vivamos juntas en el nuevo departamento. Las fechas se aproximan y al parecer la vida parece dar mejores resultados... tengo esperanzas de encontrar pronto un trabajo y lograr irme de esta casa, en contra de todos los deseos de mi madre que dice que debería ahorrar para dar un pie y en vez de pagar arriendo, pagar dividendo... ella no entiende que para mí ya es tiempo de tener una vida propia... no quiero llegar a los 30 y seguir en su casa, por mal que me esté llendo en el trabajo, no me parece sano para mi desarrollo intelectual como ser humano...
Mía
marzo 21, 2005
El miedo
Hay personas a las que las paraliza el miedo. No el miedo a fantasmas ni esas cosas, sino el miedo a la vida. A mi, algunas veces y por cortos segundos, me paraliza el miedo. La incertidumbre por no saber que será de mi vida en 5 o 10 años más... la incertidumbre de no saber si estaré viviendo o sobreviviendo.
Más de alguna vez me escucharán decir: soy una mujer soberbia y testaruda. Soberbia, porque creo fielmente que mi paso por el mundo traerá algún efecto importante, que mis acciones están comenzando ese cambio social que predico. Testaruda, porque no importa cuanto me digan lo contrario, soy una convencida de que no porque todo el mundo haga algo, eso está bien… y abogo por la recuperación del ser humano, por el abandono de los individualismo, el respeto al otro como legítimo otro, el respeto a mi misma y mi obligación de hacer que los otros me respeten.
O sea, en esta sociedad post moderna soy un marciano. El fin de semana, en la Peña en Homenaje a Gladys Marín, mientras conversaba con algunos “compañeros” del PODEMOS, llegué a esa conclusión: soy marciana. Ni siquiera soy de Venus, como decía el libro ese. Soy marciana porque veo la vida desde una perspectiva diferente.
Ahí me tienen, gastando la mayor parte de mi vida por defender los derechos de las Personas que Viven con VIH… yo no tengo VIH… sólo uno o dos de mis amigos viven con el virus… aún así, hice mía esa realidad y hoy la vivo como otro más de los 400 y tantos notificados de la Segunda Región de Chile… y vivirlo como otro más significa enfrentar discriminación, preguntas tontas de la gente y quien sabe cuántas cosas más…
Esas cosas no me dan miedo. Las cosas “grandes” de la vida nunca me dieron miedo. No tuve miedo cuando mis papás se separaron (en realidad, estaba contenta, y eso que tenía sólo 10 años), no tuve miedo cuando me fui a vivir a Temuco, sola, sin haber pisado nunca la ciudad. A mi me dan miedo las cosas triviales, las cosas pequeñas, como la llamada de mi amigo Pedro para contarme que su amigo el mesero brasileño del restaurante al que me invitó el otro día –ese al que me aburrí de coquetearle porque es demasiado lindo para ser cierto-, le preguntó por mi, me mandó saludos y le pidió mi teléfono.
Esas cosas me dan miedo, porque generalmente no es lo que me pasa. Digo, no soy un adefesio, pero tampoco es que sea yo una despampanante mujer de 1,80 metros con cara de modelo de revista. En definitiva, no creo ser el prospecto de mujer a la que le piden el teléfono en un bar de buenas a primeras. No, conmigo se trata de conversar. Ahí si, lo admito, podría ser que llame la atención sobre otras féminas presentes.
Pero no era el caso con el brasileño, que nos atendió un par de veces y, salvo por mis coqueteos descarados, no hablamos mayormente… excepto cuando le dimos las gracias por la atención… la peor parte es que ahora sé que tiene mi teléfono y yo no tengo el de él, así que no tengo mayor incidencia en esto. Pero así es la vida... nada más puedo hacer...
Más de alguna vez me escucharán decir: soy una mujer soberbia y testaruda. Soberbia, porque creo fielmente que mi paso por el mundo traerá algún efecto importante, que mis acciones están comenzando ese cambio social que predico. Testaruda, porque no importa cuanto me digan lo contrario, soy una convencida de que no porque todo el mundo haga algo, eso está bien… y abogo por la recuperación del ser humano, por el abandono de los individualismo, el respeto al otro como legítimo otro, el respeto a mi misma y mi obligación de hacer que los otros me respeten.
O sea, en esta sociedad post moderna soy un marciano. El fin de semana, en la Peña en Homenaje a Gladys Marín, mientras conversaba con algunos “compañeros” del PODEMOS, llegué a esa conclusión: soy marciana. Ni siquiera soy de Venus, como decía el libro ese. Soy marciana porque veo la vida desde una perspectiva diferente.
Ahí me tienen, gastando la mayor parte de mi vida por defender los derechos de las Personas que Viven con VIH… yo no tengo VIH… sólo uno o dos de mis amigos viven con el virus… aún así, hice mía esa realidad y hoy la vivo como otro más de los 400 y tantos notificados de la Segunda Región de Chile… y vivirlo como otro más significa enfrentar discriminación, preguntas tontas de la gente y quien sabe cuántas cosas más…
Esas cosas no me dan miedo. Las cosas “grandes” de la vida nunca me dieron miedo. No tuve miedo cuando mis papás se separaron (en realidad, estaba contenta, y eso que tenía sólo 10 años), no tuve miedo cuando me fui a vivir a Temuco, sola, sin haber pisado nunca la ciudad. A mi me dan miedo las cosas triviales, las cosas pequeñas, como la llamada de mi amigo Pedro para contarme que su amigo el mesero brasileño del restaurante al que me invitó el otro día –ese al que me aburrí de coquetearle porque es demasiado lindo para ser cierto-, le preguntó por mi, me mandó saludos y le pidió mi teléfono.
Esas cosas me dan miedo, porque generalmente no es lo que me pasa. Digo, no soy un adefesio, pero tampoco es que sea yo una despampanante mujer de 1,80 metros con cara de modelo de revista. En definitiva, no creo ser el prospecto de mujer a la que le piden el teléfono en un bar de buenas a primeras. No, conmigo se trata de conversar. Ahí si, lo admito, podría ser que llame la atención sobre otras féminas presentes.
Pero no era el caso con el brasileño, que nos atendió un par de veces y, salvo por mis coqueteos descarados, no hablamos mayormente… excepto cuando le dimos las gracias por la atención… la peor parte es que ahora sé que tiene mi teléfono y yo no tengo el de él, así que no tengo mayor incidencia en esto. Pero así es la vida... nada más puedo hacer...
Mía
marzo 20, 2005
Sobreestimada verdad
A propósito de una entrevista que leí esta mañana sobre una película que no sé si quiero ver (“Closer”) comencé a pensar que tanto hay de cierto en eso del silogismo “La verdad es buena, si digo la verdad, entonces soy buena”.
Es que tras mi trancazo de realidad de la última semana, me parece que la sociedad postmoderna cambió la dimensión ética de la verdad, trasladándola de la categoría valor a la de herramienta de nuestras éticas antojadizas.
Me explico mejor. La verdad deja de buscarse por alcanzar un estadio moral superior en nuestro desarrollo como personas. Ahora es utilizada como herramienta de manipulación. Aunque la verdadera pregunta sería descubrir si en esta sociedad postmoderna e individualista existe la verdad realmente o es más bien un cúmulo de percepciones personales que cada uno considera una verdad absoluta.
Está además el tema de las motivaciones. Ahí es cuando surge nuevamente el problema ético, ya que muchas veces confesamos algunas verdades no por ser consecuentes, sino por presiones externas, peso de conciencia, o sólo para auto convencernos que cumplimos con el silogismo y llegar a ser buenos. Nuestro individualismo se impone y por estar acorde a nuestros ataques de moralidad, causamos efectos en otras personas, a veces dañinos, sólo por sentirnos bien con nosotros mismos.
Cuando se trata de relaciones de parejas e infidelidades todas estas divagaciones se aplican mucho más literalmente de lo que se cree. Por ejemplo, cuando observamos una infidelidad. Nos sentimos culpables, cómplices del engañador y siéndole infieles al engañado. No podemos mirarle a la cara. El peso de conciencia nos supera y le decimos todo. Quizás primero habría que preguntar que prefiere: el conocimiento o el desconocimiento. Conozco un par de personas que responderían que prefieren no saber. Y si es así, ¿qué derecho tengo de decir la verdad cuando nadie me la ha pedido? ¿soy menos buena por eso?
Es que las relaciones humanas son de por si complejas. Son las dualidades que enfrentamos cada día las que nos hacen personas interesantes. Eso de tener que decidir si revelas algunas verdades por que es lo “socialmente correcto”, prefieres callar secretos en pro de las fidelidades con tu amigos, callas porque en la balanza la verdad es más dolorosa que el desconocimiento, o simplemente callas porque no te incumbe…
Mía
marzo 19, 2005
La vida continúa
Nos fuimos anoche a ver manga animé donde la Jana... Me quedé dormida en los primeros 5 minutos porque tuve un día agotador... Angelito y yo estamos construyendonos una nueva realidad, solas, de las dos, sin elementos anexos que suenen a sordidez y agua turbia... más bien queremos procurarnos un mundo al lado de un riachuelo cristalino, con rocas lisas, pajaritos sobre sauces llorones, grillos y sapitos que croan por las noches... Angelito quiere pumpullos, es decir, sapitos pequeñitos antes de sapitos, porque todavía tiene colita, son como unos espermatozoides gigantes...
Estamos buscando casa... habíamos encontrado un depa fantabulos muy cerca de donde ella trabaja y donde espero trabajar yo a la brevedad... pero no sabemos si quien vive ahí se va o no. Así que estamos buscando otro lugar... nos ofrecieron una casa por ahí cerca... Me gusta la idea. Si hay casa, hay patio. Si hay patio, hay plantas. Si hay plantas, hay flores. Si hay flores, hay tierra. Si hay tierra, capaz que Angelito me deja tener un gato, un perro chiquito, un ratoncito, cualquier cuadrúpedo peludo y mamifero que corra cuando yo llego... Pero su cara me dice "NOOOOOOOOOOOOOOOOO"...
Tiene sus razones: "no me gustan los animales", "son hediondos", "ensucian todo con sus pelos", "te dejan baboseada cuando te hacen cariño"... entre muchas otras que bien podrían aplicarse al energúmeno (mi ex), si todavía existiera en mi vida...
Esta mañana fuimos a buscar un paquete que le mandaron desde su casa... más paltas de su huerto... y una gallinita que no llegó a puerto, porque hizo mucho calor... el viaje tuvo un poco de nostalgia, porque era el mismo camino que hacíamos antes... pero la nostalgia duró sólo un par de cuadras...
Mía y Angel
marzo 18, 2005
Trancazo de Realidad
Es triste conocer a las personas cuando ya es tarde para evitar salir dañado por algo que no hicimos. Es duro, porque si al menos todo fuese producto de nuestras acciones, es decir, una consecuencia de mis actos, entonces uno asume sus responsabilidades y basta de quejas, a continuar viviendo. ¿Pero que pasa cuando nosotros no hicimos nada para terminar en medio de una batahola de proporciones mayúsculas, en la que terminamos igual de dañados que los verdaderos responsables?
Sufro de un trancazo de realidad. Un porrazo de circunstancias chocantes. Un garrotazo de verdades crudas. Primero, está mi ex –de aquí en adelante conocido como “el energúmeno”, no por lo que hizo mientras estábamos juntos, sino lo que vino después- que ahora no me contesta el teléfono. ¿Quieren saber la razón? El muy descarado, aprovechándose de un adicional en mi tarjeta de crédito que le di mientras vivíamos juntos, sacó quién sabe qué cosa para quién sabe cual de sus pololitas actuales. No me importaría, terminamos hace un año y ya había usufructuado de mi crédito, pagando las cuotas a tiempo y evitándome problemas. Pero el muy déspota dice lleva dos meses sin pagar y a mi me llaman y me llaman… hasta que atiende mi papá por teléfono, se preocupa de su pobre hija cesante, va y paga las cuotas atrasadas… Vergonzoso… mi padre jamás me había pagado una cuenta en mi vida, ni siquiera en mis tiempos de cesantía… y ahora por culpa de ese sinvergüenza, me tengo que tragar esta deshonra a mi calidad de administradora de mis bienes…
Quiero que entiendan el contexto: él y yo estuvimos 2 años juntos, de los cuales, vivimos juntos 4 meses, aunque él lo niegue. En ese contexto le di yo el famoso adicional. Cuando terminamos, argumentó que necesitaba pagar las cuotas que debía y cuando terminara me enviaba el plástico. Aquí viene mi error: creer. Que iba a saber yo que esos dos años fueron pura invención y que él, en realidad, era un descarado aprovechador. Anoche fui a cerrarle su adicional… hoy lo llamo para improperarlo y decirle que vaya a pagar… sólo para que pase la vergüenza de que le digan en caja “lo siento, señor, su adicional está bloqueado”… luego me encargaré de que me deposite el dinero, porque a mi pobre padre le salió $60.000 la última gracia del señorito.
Esa es la decepción número 1. La otra tiene que ver con La Tribu. Esto de venir a conocer a la gente y descubrir que en verdad te han vendido una cara de bondad que en realidad no existía. Digo, porque cuando alguien puede faltar gravemente a la fidelidad de una amistad de meses, casi un año, ¿qué queda para nosotros, que nos conocemos y hemos formado está tribu sólo este verano? Nada, absolutamente nada, podrá hacerme recobrar la confianza, que ya estaba medio quebrada por eso del elemento entrópico.
Me explico mejor. Pepe cometió un error grave y se anduvo metiendo con la pareja de K. Entremedio, consoló a K como la mejor amiga del mundo cuando a la pobre la patearon argumentando sólo estupideces. Malo por Pepe, que en realidad quiebra todas las normas de fidelidad y lealtad de cualquier amistad.
En todo caso, no es lo más sórdido. Eddu le informó a K de la situación enviándole conversaciones de MSN que Pepe dejó en su computador (de Eddu) y que ella ya le había preguntado (a Eddu) si no se borraban. Él respondió “no te preocupes, yo arreglo eso”… vaya arreglito, como verán, guardarlas para enviarlas por MSN y luego amenazar de enviarlas a la pareja de Pepe (que también tiene)… lo peor es el argumento: “no te permitiré que vuelvas a hacer con ella lo que hiciste conmigo”… y aquí viene la razón verdadera: Pepe anduvo en algo con el elemento entrópico (la mina que vive con Eddu en el Depa) y a él, muy en el fondo, le molesta que fuese Pepe le Puf y no él quien compartía esa cama. Y ellos son amigos de mucho antes que nosotros los conociéramos.
Verán que sordidez de historia. Y Angelito y yo metidas en mitad de todo, enterándonos de todo y sin saber para donde tirar. Pepe tiene trastocados los valores morales, K está archienojada y ultradestruida, Eddu cayó, para mí, en la categoría de manipulador empedernido. Le hice un funeral imaginario, porque él es parte de las personas que murieron en mi vida. Nada de lo que diga o haga podrá hacer que a mi me vuelva a interesar su persona. Angelito es menos taxativa, así que a él, en verdad no le importa nada más. Claro, como ahora tiene otras intenciones con ella sólo le importa que Angel le siga hablando. El resto de la tribu ya no somos importantes para él. Lo que me demuestra que nunca lo fuimos. Manera ingrata de descubrir como es en verdad la gente.
A ver si ahora entienden porqué tengo un trancazo de realidad.
Mía
marzo 16, 2005
Algo de cansancio... una vida cansada
¡Qué larga que resulta la existencia cuando sentimos perdido el camino! ¡Qué agotadores amaneceres cuando los agobios se vuelven cada vez más extenuantes! Creo que esta mañana me levanté con ánimos deportistas... Hoy practicaré el deporte de quejarme gratuitamente de mi vida, de quejarme por los resultados de lo que yo misma sembré...
A pasos de cumplir los 30 (en realidad son sólo 28, pero ya empecé una campaña de autoconvencimiento de que tengo 30, así cuando de verdad los cumpla no me generarán crisis alguna), he escapado al menos en dos ocasiones al santo vínculo del matrimonio. Y sin embargo hoy siento que me gustaría tener algo de compañía... La soledad, a menudo buena consejera, hoy no se digna a acompañarme gratamente, como la mayoría de las veces.
Eso es, la mayor parte del tiempo me siento cómoda con lo que soy. Aunque en este rato esté cesante (desocupada, para que suene menos ofensivo) y sin pareja (de ningún tipo, ni siquiera de esos "amigos paleta" que sirven tanto para el descargo de las energías sexuales), siento que ambos factores son sólo circunstancias y que, ante todo, conservo la consecuencia en mi vida y, por lo menos, me conforta el saber que no vendí mi capital intelectual por unas pocas monedas, como lo hace el común denominador de los chilenos.
No es que desee sonar "anti sistema", pero la verdad es que creo que este mundo está patas para arriba y que no porque las cosas sean práctica común, significa que están bien... seguiré siendo una mujer testarura, convencida de que mi postura es la correcta para mí (y aclaro este punto: la corrección de esta postura es aplicable sólo a mis circunstancias) y que no me importa ir en contra de la corriente... que seguiré dejando trabajos para no hacerme parte de conductas odiosas, de jefes acosadores, explotadores y, encima, que te venden la pomada de una "empresa socialista, porque nos repartimos las ganancias"... puto socialismo de libre mercado el que se vive en este país... gobiernos de izquieda que privatizan empresas rentables del estado por bien de quienes participan en las instituciones de gobierno o para pagar favores políticos de campañas...
Se habrán percatado que hoy me levanté con una preponderancia de mi gen antigobierno... lo tengo, no tan oculto, pero aflora con tanta fuerza sólo en contadas ocasiones... como por ejemplo cuando leo que angelito está planchada... ¿cómo es posible, si trabaja más de 12 horas diarias? Sus jefes, de esos doctores omnipotentes que se creen semidioses como todos los médicos de este país, la explotan tanto a la pobre: trabaja desde ls 8 de la mañana hasta las 2 de la tarde, cuando tiene suerte y puede salir a las 2... tiene que entrar de vuelta a las 2 y media y ya no sale hasta las 9 de la noche... generalmente no alcanza a almorzar... ¡imagínenlo! todo el día en esas consultas y lo que le pagan no le alcanza para vivir... ¡y ella vive sola! Para darse algunos lujos (entiendase, para comprar jugo y tomar por las mañanas, porque esos son los lujos) ella trabaja en un ciber café los fines de semana. Ahí nos conocimos, porque ahí trabajaba yo y de ahí me fui, porque me sentí defraudada de mi jefe que decía que la empresa era un "proyecto de todos" pero no fue capaz de cuidar de Pepe (que también trabajaba ahí) cuando su socio se la llevó en el auto a una playa oscurita quien sabe con qué malas intensiones... ni mucho menos cuando ese mismo socio la gritoneaba a diestra y siniestra porque Pepe llegó con pololo a la empresa... después de eso vino la política de no recibir pololos ni amigos en el ciber... ¿y se supone que yo tengo que avalar eso y hacer que sigan ganando plata, que yo no veo, porque al final igual me pagaban una cagada?
Pero que más da... a veces la vida no es tan justa... a veces ni nosotros mismos somos justos...
Mía
marzo 15, 2005
SIN FINANCIAMIENTO
Triste es recordar que hace una semana tenia mas de 50.000 mil pesos en mis manos y hoy no tengo ni uno... nada... ahhhh, el cochino dinero que me hace falta. Gracias a su ausencia he perdido el contacto con el resto de la tribu... es bastante triste ya el no saber cómo van las vacaciones de Eddu o cómo están las pequeñas scout, cómo les fue en su encuentro con el universo, la naturaleza y esas cosas con las que a ellas les gusta involucrarse...
Ahhhh... aún estoy enferma y estoy trabajando y mi pobre compañera chocó su autito anoche. Está adolorida y tiene penita por que nadie en su casa, solo su mamá, le preguntaron por su estado físico... todos se preocupan por el auto y por el cuanto deberá pagar. ¿Ven a lo que me refiero? Siempre esta primero el cochino dinero...
Angel
marzo 13, 2005
La plaga
Extraño. Estamos tan compenetradas que nos hemos enfermado en bloque... eso de que yo estuve enferma y que angelito venía igual de enferma no es una casualidad: al parecer nos enfermamos en el mismo lugar y la gripe evolucionó en diferentes lugares del país, para terminar aquí otra vez.
Creo que tendremos que pegarle el resfrío a alguien para que se nos pase completamente. Mientras tanto el Eddu exprime limones y los mezcla con "miel de arveja", para obligarnos a tomar y lograr que detengamos nuestro concierto de carrasperas, estornudos, flemas y otras mucosidades.
Angelito tiene nostalgia de casita. Dice que extraña levantarse por las mañanas y ver su casita, ver la neblina matinal y escuchar a su padre que la obliga a levantarse para luego ir a acostarse otra vez y dejarla tomar desayuno sola.
Por nuestra parte, ya hacemos planes para irnos a vivir solitas... Tendremos que ver si encontramos un lugar que cumpla con los requisitos para ser cubil felino, que quede cerca del trabajo de Angel, con entrada independiente, dos dormitorios, no importa que tenga un living comedor pequeñito o si lo tiene junto con la cocina... yo por lo menos ya tengo un refrigerador chiquitito en el que podremos guardar todas las verduras que comeremos... porque a mi me gustan mucho las verduras... es más, muy en el fondo de mi corazón, quisiera ser espárrago, porque son simpáticos, vegetan todo el día y la gente no los come mucho, así que tengo un alto porcentaje de vida.
Angelito quisiera ser zanahoria... aunque no quisiera ser zanahoria... en realidad, prefiere ser algún animalito... dice que quisiera ser delfín, pero Eddu acaba de aclararle que los delfines se violan a las delfinas... así que ahora quiere ser Orca.... el Eddu le dice que las orcas se comen a los delfines, pero ella le responde que es porque los delfines son unos maricones que violan a las delfinas, así que es merecido que se los coman las orcas... dice que es una orca enorme, que se ríe así "jo joi... jo joi... jo joi"...
Eddu lleva casi una hora exprimiendo limones y diluyendo la miel en el jugo... de aquí a que termine el remedio, el jugo se habrá evaporado, porque se demora muchísimo... yo toso entre palabra y palabra... Angelito arranca de los remedios de Eddu... Pepe está desaparecida porque se fue a acampar al desierto en su testarudo intento por ser scout... ¿estará empampada?... Zuli viajó a Santiago y debe estar muy aburrida, porque no ha querido decirle a sus amigos que está allá... en el fondo, debe extrañarnos mucho... K, creemos que K estará durmiendo, porque anoche se fue muerta de sueño a dormir, no quizo seguir hablando... me parece que todavía analiza eso de la metáfora del pan y que le gusta que se lo coman... al pan, digo... y tratado de buscar argumentos para explicarnos eso de los scouts y su calidad de líderes (es que ella es la scout original, en una lógica totalmente entendible, ya que es scout hace mucho y no entró a los 22 años)... en fin, todos estamos sobreviviendo... en algún lugar del mundo...
Mía
marzo 12, 2005
El Regreso
No es la segunda parte de ninguna película mala de ciencia ficción o de esas de terror para adolescentes problemáticos... la que regresó fue Angel, que se bajó del bus con una tos parecida a la mía (aunque no tan dramática), una mochila llena y una caja "mega" gigante, como diría Pepe.
Así que no hay carrete esta noche. Sólo veremos una películas en el Depa, sin fumar y haciendo valer nuestro derecho a aire limpio en espacios cerrados. O sea, el que quiere fumar se va al balcón o sale fuera del Depa. Necesitamos aire libre de partículas contaminantes.
Estoy contenta, porque luego de casi una semana de hablar cortado, hoy finalmente puedo sacar voz para hablar cinco frases de corrido. Encima, me compraron dos jarabes para la tos: un expectorante y una antihistamínico, para asegurase que no volveré a resfriarme.
Con Angelito estamos sentadas viendo qué más les podemos contar... ella trae muchas novedades. Por ejemplo, firmaron tregua con el gato de su herman, que desaparecía de casa cuando ella estaba. Nadie sabe por qué causa o por qué razón, el gato simplemente no volvió más. Aquí creemos que era su forma de decirle "no me importa, tu te vas y yo me quedo". Ustedes saben como son los gatos.
De paso, a nuestro angelito le faltó solo el canasto de mimbre. A falta de él venía esa caja mega grande, donde trajo gallina fiambre, huevitos de campo, manzanitas de su fundo, mermeladas de fabricación casera, queso de cabra y maderos propios de su zona... y un sinfin de otros vegetales, entre los que se cuenta un morrón superdesarrollado que yo convertiré en ensalada mañana, sin convidarle a nadie.
No es mi afán decirlo, pero si ustedes piensan que sólo le falta el vestido floreado, no me quedará más que asentir con la cabeza, disimuladamente, para que ella luego no me salga con una sarta de improperios irrepetibles, que por cierto le salen muy divertidos...
Pepe, por su parte, sigue jugando a las fogatas y las carpitas... No lo entiendo, ¿cual es el afán de meterse a scouts a los 22 años? ¿acaso no tuvo infancia? ¿no le dieron pecho cuando era guagua? Pero en fin, la queremos igual, irresponsable y toda, egoista y toda, desfeminizada y toda... te amamos Pepe, con ese pelo ¿rosado? ¿blanco? ¿magenta? bueno, te amamos igual...
marzo 11, 2005
Parte de la Historia: La Tribu
Somos una tribu urbana... al menos así nos autodenominamos. Algó así como un montón de personas que terminaron juntas, estableciendo lazos de amistad fuertes. En algunos puntos de estas relaciones, los lazos son más resistentes que en otros.
Lo cuento porque en muchos puntos de este cibernético modo de expresión, encontrarán la palabra "tribu" y no sabrán de que se trata. En nuestro caso, la tribu está compuesta principalmente por elementos femeninos. Hablo de elementos, porque aquí se aplica laTeoría General de Sistemas. Somos un sistema social.
Sólo existe un elemento más culino: Eddu. Con todas sus especiales características, Eddu puede definirse como un hombre con un amplio lado femenino. Él es suceptible a los "pucheros", no soporta lágrimas en ningún ojos de mujer, se enamora hasta las patas por largo tiempo y a pesar de tener conciencia de que a veces esos amores le son totalmente impropios, es testarudo en mantener sus sentimientos incólumes a las adversidades.
Luego estamos nosotras: K, Pepe, Angel, Suly y yo, Mia. Entrar a describirnos sería motivo de un blog apartado para cada una. Como buenas mujeres, todas tenemos un mundo inexplorado, inexplicable, imposible de entender y totalemente entendible con sólo mirar bien dentro de nuestros ojos.
Respecto de nuestras formas de relacionarnos, debemos asumir que somos una tribu moderna. En nuestro interior tenemos todo tipo de tendencias sexuales, posiciones políticas y tipos fisiológicos (es decir, morenas, trigueñas, lindas, menos lindas, entre otros). Es más, en el caso de las féminas, existen relaciones de pareja al interior de la tribu. Sin dar nombres, ni ninguna pista de quien es quien, puedo decir orgullosa que hemos sido capaces de reconocernos, aceptarnos y llegar a querernos.
Ahora bien, los lugares de reunión: El Depa y mi Casa... en el Depa, durante el verano, vivía Eddu y Pepe. Digo durante el verano, por que fue el tiempo en que estuvo de vacaciones la compañera de departamento de Eddu, llamada aquí en algún punto, el elemento entrópico obligado. No entraré en descripciones odiosas porque ella no es parte de esta Tribu y si es así, no fue por que no tengamos nosotros abierta la inscripción. Eso es tema de otra historia.
El caso es que Pepe fue conminada a salir de esas cuatro paredes y si bien el Depa sigue siendo sitio de reunión, su calidad de permanente queda en duda. Eso será objeto de estudio de nuestra próxima reunión, tras el retorno de Angelito, que llega mañana de vacaciones.
Y mi Casa... donde vivo con mi mamá, y la Suly. Aunque mi casa también está en veremos, porque la vida me dice que ya es tiempo de irme de aquí, y considerando que Angelito quiere tener compañera de pieza para arrendar algo mejor de lo que vive, probablemente en el transcurso del próximo mes tengamos nuestro cubil felino para convertir en nuevo sitio de reunión permanente.
Mía.
Profundamente enferma
Verán... tras mis estudios de campo del fin de semana (esos de la compañía y todo lo demás), me agarré un resfrío que ni les cuento... el caso es que no se me quiere pasar... así que me quedaré este fin de semana en cama... lástima por Angelito, que vuelve mañana y de seguro querrá salir en la noche... pero en virtud de mi estado febril tendrá que esperar para otra ocasión, donde la salud y el bolsillo acompañen en mejores condiciones...
Por ahora me iré a dormir... todo duele... cada una de las células de mi cuerpo tose o estornuda... es más, a algunas les salieron oídos sólo para dolerles y aumentar así su malestar generalizado... a ratos me siento mejor... a ratos siento que me come un abismo de mucosidades y me ahogo en un mar de carrasperas... a ratos siento que sólo vegetar me servirá de algo... la pregunta es: ¿qué clase de vegetal no se resfria? Siempre quise ser espárrago... son simpáticos ellos... creo que en otra vida de Ser menos evolucionado fui espárrago... o alguna clase de vegetal verde... o sea, definitivamente betarraga no fui...
Los efectos de la fiebre, como verán, me hacen delirar... o más bien, creo que no es efecto de la fiebre, sino de mi normal y peculiar forma de ser... decir me queda a K, que no esté triste... que de verdad, al pan le gusta que se lo coman... y que es un pan muy raro aquel que arranca de las mandíbulas humanas, porque el pan nace para ser comido... claro está, a menos que ese pan quiera ser comido por ser humano... de todas formas, nuestra necesidad de comer pan es inherente a nuestra calidad de personas y la diferencia radica en que algunos seres humanos podrán ser clasificados en la categoría pan y otros estaremos en la categoría personas... tu y yo, querida K, somos parte de la segunda categoría...
marzo 09, 2005
Nace mi primera hija
No sé porqué, pero he decidido compartir con ustedes un momento muy íntimo de mi vida... aunque estas palabras las lean sólo mis más cercanos amigos, quien no me dice que alguna vez -cuando el reconocimiento mundial ya haya llegado-, alguien sepa que fue aquí que anuncié el nacimiento de mi primera hija... más bien, su concepción...
No se asusten... no se trata de una de esas hijas que se hacen de a dos... estás nacerá sólo de mi interior y perdurará por siempre, para toda la vida... espero verla un día convertida en una adulta, con caparazón dura, para poder llevarla de la mano a quién, supongo, podría ser su padre...
No estoy feliz, ni triste... el problema es que estoy feliz y triste, pero que no lo estoy al mismo tiempo... porque tras semanas de oir esas palabras en mi cabeza, de que las frases se agolparan en mis sienes, hoy he terminado de escribir el primer capítulo de lo que creo será mi primera novela... absurda novela de amor, supongo, pero mía al fin y al cabo... les regalo el primer párrafo:
"Y pensar que, después de tantos años, tú y yo no logramos ser buenos, ni siquiera por carta. Y que después de tanto intento, la vida nos hizo creer que había más oportunidades sólo para reírse un poco más a costa nuestra. Y aún así descubrir que en este viaje, Cristóbal y yo fuimos siempre pasajeros de la mejor clase: incapaces de arriesgar, pero siempre en despedidas elegantes"...
Mía
El baile de Pepe...
Anoche estuvimos en el Depa... la idea fue reunirnos como siempre, tomar tecito y conversar un rato... De pronto Eddu comenzó a poner música en el PC, música bailable, de esa que tiene coreografías y que bailan en programas en el tele...
Así que estuvimos bailando... Pepe le Puf definitivamente tiene un problema serio de coordinación. Es terrible, pero su coordinación es nula. No pensé que llegara a conocer a alguien que a sus 22 años todavía no lograra tener una total conciencia de su cuerpo. Pero basta verla bailar y descubrir de todo puede pasar en este mundo.
Aún así, ella es feliz bailando. Baila libremente, sin ningún tapujo, con los brazos al aire, arrítmicamente, moviendo la cabeza sin ninguna coherencia con el resto del cuerpo. Algo así como un baile totalmente tribal. Verla bailar es como ver a esos personajes que uno imagina cuando oye música de las tribus africanas, con tambores que imitan el sonido de una estampida en movimiento.
Es más, si entrecierras los ojos y pones un poco de tu parte, puedes verla en vestimenta de guerra, o bien, con trajes ceremoniales para ver si logra hacer llover en este desierto. Digo, ella no responde alos parámetros de lo socialmente establecido. Ninguno de nosotros lo hace y por eso es que llegamos a construir esta tribu. Disgregada a veces. Homogenea en ocasiones. Única, la mayor parte del tiempo...
Mía
marzo 08, 2005
La falsa Teoría
¿Recuerdan eso de que es inversamente proporcional la actividad sexual con las capacidades culinarias de la gente? Pues bien, tras mi estudio de campo del fin de semana y luego de incorporarme a la rutina, he descubierto que no es tan cierta esa teoría...
Digo. Si se supone que debía cocinar mal después de pasar una noche en compañía (omitiré la calidad de ésta, nombres o cualquier seña que dé alguna pista, en honor a mi "amnesia temporal voluntari"), entonces resulta que sigo cocinando igual que antes... beneficio para los integrantes de la tribu, que en todo caso, no han venido a tomar té ni nada por el estilo, porque como Angelito sigue de vacaciones y en una guerra declarada contra el infame gato de su hermana, todos andan medios disgregados por la vida...
Yo sigo en mis proyectos personales que espero algún día lleguen a darme beneficios económicos para que de una vez por todas partamos a compartir departamento con Angel... así tendremos espacios propios y seremos felices por instantes, así como es feliz toda la gente, porque nadie es feliz todo el tiempo... por algo dicen eso de que la felicidad se construye de momentos...
marzo 06, 2005
La mañana después...
Hoy el cielo y la tierra me sonríen... a pesar de los problemas propios de la convivencia humana con mi madre, la tierra me sonrie con polvaredas alegres y remolinos de papeles... el cielo asoma nubes de animalitos en mi nombre...
Para que vean los efectos que tiene en la vida de una mujer sola como yo (me declaro abiertamente una mujer sola) la buena compañía, aunque sea de una noche... por común acuerdo...
No me cuestiono el tema emocional de una noche de compañía... y divido las noches: las hay de lujuria y pasión, cuando se trata de noches de sexo puro y salvaje; las hay de cariño, cuando se trata sólo de caricias inocentes libres de todo deseo sexual; y están las de compañía, equilibrio perfecto entre la primera y la segunda, y que en la mayoría de los casos resulta de las más placenteras...
Aún así, debo admitir que mis mejores noches fueron de lujuria. Pero no es el caso de la última noche, que fue una de compañía... y de la buena... buena conversación coronada por una noche de sexo tranquilo, placentero y agradable...
Lo malo es que la tribu se ha puesto en huelga de hambre involuntaria... por todo esto de la teoría que directa proporcionalidad entre la carencia de actividad sexual en mi vida y mi calidad en la cocina. Explicado en términos simples, se supone que al no tener sexo desvio mi energía sexual a la cocina, y resultado de ello, tenemos comida muy rica...
Así que, soterradamente, la tribu ha reclamado por mi noche de compañías... dicen que ahora tendrán que soportar un período de comida quemada, salada, desabrida, con sabor a agua o todos los factores juntos al mismo tiempo...
Yo por mi parte, agradezco anónimamente los halagos a la suavidad de mis labios, lo agradable de mi olor, la calidad de mi pelo, y ante todo, mi carácter cariñoso y amable (ese que surge sólo en contadas ocasiones de mi vida) y y ese verme tan sutil en un mundo carente de sutileza... no sé si realmente soy todo eso, pero sigo agradeciendo, porque son palabras que llegaron justo cuando lo necesitaba...
Mia
marzo 04, 2005
El gato de mi hermana
El gato de mi hermana es plomo y amarillo con blanco. Tiene los ojos verdes con matices de muchos colores. Mi hermana lo adora y él la espera con ansias en la puerta de la casa. A él le gusta vender muñecas, pero yo no se las compro.
Mi hermana es la negra chica o la chicoman o la nillafe... si prefieren, la pueden llamar por su nombre: Nidia. Ayer salimos a dar un paseo y en la noche salimos con mi otra hermana. Volvimos cerca de las once a casa y el gato -que es muy mono- estaba en la puerta. Note su mirada hostil hacia mí, pero no me importo. Debió importarme, ya que el gato me odia con todas sus fuerzas.
De muestra un botón: anoche, cuando mi madre fue a darnos la buenas noches, el gato se coló tras de ella y aggggh se hizo pipí sobre mi ropa... sólo sobre mi ropa que estaba toda junta... él sélo se meo en mi ropa... GATO INFAME, quería matarlo, pero mi mamá y la negra chica me lo quitaron de las manos. Él me miró con tono burlesco y lo comprendó: me estaba declarando la guerra.
Esta mañana desperté contenta y salí al patio a degustar el día... el muy maldito me enterró sus garras en la cabeza, tirando de mi pelo con todas sus fuerzas gatunas... luego huyó por el tejado... ahhh, pero la vengaza no esperó... en la tarde lo pillé durmiendo la siesta sobre la lona del patio... ja ja ja ja ja... sólo diré que saltó muy alto... nada más...... el gato me odia y yo a él.
Angel.
marzo 03, 2005
y mi viaje fue una locura
Hola... he llegado sana y salva, pero con un gran disgusto hacia el sexo masculino....
Les cuento: en mi viaje la mayor parte del tiempo me fuí sola y aproveché de dormir a diestra y siniestra en ambos asientos. Eso sin mencionar el hecho de que el ayudante del chofer, a las doce y cinco, fue hacia mi asiento a preguntarme si me había tomado mi PASTILLA... no les diré cuál fue mi respuesta(·$$%%$"$%)...
Casi al llegar a Serena una joven de 18 años estaba muy triste al otro lado del pasillo. Me pidió un espejo y como yo soy un alma caritativa, la invite a sentarse conmigo... mala decisión: ella me contó que se había ido con su pareja a Antofa, pero que ahora venía arrancando de él por que la golpeaba todos los días, sin mencionar que la vecina era amante de su pareja y él dejó que la golpeara... pobre Juliana, tenía moretones en todo su cuerpo... lo último que le hizo fue tomarla por los brazos para que la otra mujer -que tenía su "hombre"- la golpeara. Me dio mucha pena, por que ella estaba recién operada debido a la pérdida de su hijo con el muy soquete... estoy muy molesta con ese hombre en particular.
Finalmente llegué... a las 11 de la mañana y muy descompensada por el cansancio y por aquella historia. Mi mamita me tenia... adivinen que... paltita... jejejej (no como nunca) y mi padre está re bien, con un cuello ortopédico. Sus movimiento son similares a los de Pepe le Puf cuando tenía torticolis, pero con mayor gravedad.
En fin... están todos contentos. Ya los salude, y ya golpeé a mis hermanas. Mañana me retractaré y les hare cariño como si no hubiera pasado nada... de paso, me sacaron la chucha y me castigaron una semana... perdón, eso fue un "deja vu" a mi infancia...
Triste es saber que nuestro integrante masculino se fue con otra a beber... Me duele el alma... No puedo hablar más al respecto, por que me da mucha pena...
Angel...
Las vacaciones de Angel
Verán... anoche Angel se fue de vacaciones... aquí nos quedamos el resto del grupo -esta tribu urbana con códigos propios que el resto del mundo ve con desconfianza, como se mira a un grupo de payasos en un show en mitad de la calle- buscando cómo crear nuevos vocablos para que Angel no logre entendernos completamente a su regreso... es el castigo por marcharse dos semanas, cuando prometió irse menos tiempo.
Aunque resulte poco digno admitirlo, yo la extraño más de lo que se ve a simple vista... anoche, luego de la despedida y de nuestra performance de "Humillemos al Angelito frente a los choferes del bus", nos fuimos al depa a tomar tecito... sin afán de hacer sentir mal al resto, hay ciertos detalles en que Angelito es la única que responde con rápidez a mis chistes negros, a mis bromas en doble sentido y a mi constante declaración de "necesito con urgencia un hombre"... eso, aunque haya pasado la mejor de las noches sin que el resto se entere...
Es que todos guardamos algunos seretos... supongo que en secreto cada uno admite que el resto no responde como responde Angelito y que ante la ausencia de cualquiera de los elementos el sistema no funciona al cien por ciento...
Ahora queda aguardar por el tan esperado regreso de Angelique y ver que pasa con la llegada del "elemento entrópico obligado" que pronto arribará al depa, con el beneplácito de Eddu y el desprecio de Pepe Le Puf...
Mia
marzo 02, 2005
Angelito de viaje
Angelito parte hoy de viaje... está contenta... dice que hace mucho que no ve a sus papás y que su "negra chica" está muy ansiosa (la negra chica es su hermana menor).
Mientras tanto, nosotros esperaremos su regreso haciendo algunas de las cosas que hacemos siempre: juntarnos en el depa, tomar té en mi casa, jugar Dynomite y dedicarnos a dar miradas EMO al mundo...
Las locuras de Angelito quedarán para su regreso... el próximo 11 de marzo... llega el 12 sólo para asegurarnos que tendremos una noche de baile y juerga a nuestro más puro estilo... asumo que somos especiales para nosotros mismos, que al resto del mundo le somos totalmente indiferentes, pero aún así el Angelito estará de viaje y creo que lo extrañaremos...
Mia
Aquí les va un cuento...
Las Polillas
Qué más basta decir, salvo que lo he perdido todo. No es que tuviese mucho, pero si me queda claro, después de tanta verborrea cíclica y paulatina, que lo he perdido todo. O quizás sea que sólo he alcanzado nada.
Como partió. Recuerdo un techo mal pintado, deslucido. Tablas recubiertas de papel que retienen esas pequeñas pelotitas color café que dejan las polillas cuando comen la madera. Por ahí partió todo, por esas pelotitas diminutas que cada noche estaban sobre la cama cuando nos íbamos a dormir.
Quién iba a pensar que las pelotitas fuesen capaces de provocar una crisis matrimonial a menos de dos meses de casados. Yo dije, no es bueno casarnos, pero para cuando terminé la frase, la fecha ya la habían fijado mi padre y mi futuro marido. Y ya no quedó otra que entrar al altar con un vestido color marfil. Cinismo puro… yo no era virgen ni él mi primer hombre… aunque él así lo creía.
Pero estábamos en las pelotitas que dejan las polillas. Todas las noches, antes de dormir, había un pequeño montón de pelotitas justo en mi lado de la cama. Confabulación, hasta las polillas se oponían a mi testaruda decisión de seguir con este matrimonio de mentiras. Porque yo trabajaba igual que él, hasta me quedaba más tiempo en la oficina para no llegar y descubrir que ahí estaba el montículo de pelotitas café, diminuta forma de minar mi disposición a construir un “proyecto mutuo”, como le llaman al matrimonio… y eso que yo nunca quise casarme, sólo hice lo socialmente aceptado.
Y cada noche los vestigios de las polillas me comprobaban que esos insectos se comían mi techo y acababan con mi tolerancia. Claro, porque en su lado de la cama no había rastros de polillas y entonces él se limitaba a tirar hacia atrás las frazadas y dormir. A mí, que me comieran las polillas o que sus “regalitos” no me dejaran dormir. Nada de sacudir la cama, porque eso provoca ruido y despierta al hombre de la casa. Entonces el problema podría ser mayúsculo y generar una dinámica de violencia que nadie sabría donde termina.
El sacrificio del matrimonio. Yo tenía un buen trabajo, un departamento pequeño, pero agradable, un buen grupo de amigos y un novio eterno al que no le pedía mucho a cambio de no dar mucho tampoco. Entonces el novio se junta con el padre, y la vida de la novia a la basura. Y así lo perdí todo: el trabajo ya no fue más entretenido, los amigos se fueron porque ahora tenía marido, el departamento era demasiado chico para dos personas y el novio ahora es marido, no habla porque la comunicación y el galanteo no se aplican al matrimonio. Mientras tanto, yo recojo con cuidado los rastros de polillas a mi lado de la cama y lo voy dejando en una bolsa bajo el mismo lado de mi cama, cada noche, irrelevante e infranqueablemente, durante estos dos meses.
No creerían lo mucho que se junta en dos meses de no hablar por las noches por estar retirando pelotitas cafés de tu lado de la cama. Sacos de esa materia que parecen granos de arena pero más grandes, madera digerida, supongo. Y lo peor, la materia es directamente proporcional a la disconformidad que produce el casarte por hacer lo socialmente aceptado.
Entonces, cuando el marido apaga la luz en mitad de tu ritual de aspirado porque no lo dejas dormir, resulta casi normal reaccionar metiendo su cabeza en el saco de regalos de las polillas… y cuando las compañeras de celda se ríen del incidente, resulta casi un milagro que nuevamente las polillas vuelvan a anidar sobre tu cama.
Qué más basta decir, salvo que lo he perdido todo. No es que tuviese mucho, pero si me queda claro, después de tanta verborrea cíclica y paulatina, que lo he perdido todo. O quizás sea que sólo he alcanzado nada.
Como partió. Recuerdo un techo mal pintado, deslucido. Tablas recubiertas de papel que retienen esas pequeñas pelotitas color café que dejan las polillas cuando comen la madera. Por ahí partió todo, por esas pelotitas diminutas que cada noche estaban sobre la cama cuando nos íbamos a dormir.
Quién iba a pensar que las pelotitas fuesen capaces de provocar una crisis matrimonial a menos de dos meses de casados. Yo dije, no es bueno casarnos, pero para cuando terminé la frase, la fecha ya la habían fijado mi padre y mi futuro marido. Y ya no quedó otra que entrar al altar con un vestido color marfil. Cinismo puro… yo no era virgen ni él mi primer hombre… aunque él así lo creía.
Pero estábamos en las pelotitas que dejan las polillas. Todas las noches, antes de dormir, había un pequeño montón de pelotitas justo en mi lado de la cama. Confabulación, hasta las polillas se oponían a mi testaruda decisión de seguir con este matrimonio de mentiras. Porque yo trabajaba igual que él, hasta me quedaba más tiempo en la oficina para no llegar y descubrir que ahí estaba el montículo de pelotitas café, diminuta forma de minar mi disposición a construir un “proyecto mutuo”, como le llaman al matrimonio… y eso que yo nunca quise casarme, sólo hice lo socialmente aceptado.
Y cada noche los vestigios de las polillas me comprobaban que esos insectos se comían mi techo y acababan con mi tolerancia. Claro, porque en su lado de la cama no había rastros de polillas y entonces él se limitaba a tirar hacia atrás las frazadas y dormir. A mí, que me comieran las polillas o que sus “regalitos” no me dejaran dormir. Nada de sacudir la cama, porque eso provoca ruido y despierta al hombre de la casa. Entonces el problema podría ser mayúsculo y generar una dinámica de violencia que nadie sabría donde termina.
El sacrificio del matrimonio. Yo tenía un buen trabajo, un departamento pequeño, pero agradable, un buen grupo de amigos y un novio eterno al que no le pedía mucho a cambio de no dar mucho tampoco. Entonces el novio se junta con el padre, y la vida de la novia a la basura. Y así lo perdí todo: el trabajo ya no fue más entretenido, los amigos se fueron porque ahora tenía marido, el departamento era demasiado chico para dos personas y el novio ahora es marido, no habla porque la comunicación y el galanteo no se aplican al matrimonio. Mientras tanto, yo recojo con cuidado los rastros de polillas a mi lado de la cama y lo voy dejando en una bolsa bajo el mismo lado de mi cama, cada noche, irrelevante e infranqueablemente, durante estos dos meses.
No creerían lo mucho que se junta en dos meses de no hablar por las noches por estar retirando pelotitas cafés de tu lado de la cama. Sacos de esa materia que parecen granos de arena pero más grandes, madera digerida, supongo. Y lo peor, la materia es directamente proporcional a la disconformidad que produce el casarte por hacer lo socialmente aceptado.
Entonces, cuando el marido apaga la luz en mitad de tu ritual de aspirado porque no lo dejas dormir, resulta casi normal reaccionar metiendo su cabeza en el saco de regalos de las polillas… y cuando las compañeras de celda se ríen del incidente, resulta casi un milagro que nuevamente las polillas vuelvan a anidar sobre tu cama.