abril 06, 2005

Materias Reprobadas

Si la vida fuese un gran centro de aprendizaje donde ciertos temas se consideraran ramos, materias o cursos, yo habría reprobado los de Relaciones Humanas y Sociología de las Conductas Sociales.

Es que ya no entiendo a la gente... no entiendo cómo se mueve el mundo... no tengo claro cual debería ser mi comportamiento para encajar en alguna parte fuera de nuestra cálida y compleja tribu. La vida es tan simple al interior de la tribu. Sólo se trata de ser uno mismo, reirnos de la vida, sentirnos acogidos, sin cuestionamientos.

Afuera no sé bien qué traje me queda mejor. La seriedad es efectiva, pero aislante. Verse serio asegura ser considerado responsable, inteligente, productivo y proactivo. Pero las otras personas no se acercan a quienes se ven muy serios.

Tuve un día de roles políticos. Alguna vez he contado en este blog de mi militancia política en el Partido Humanista y mi trabajo por la unión de la izquierda en la plataforma PODEMOS, unión del PC, el PH y el MIR. Pues bien, hoy fue un día de acordarme que soy presidenta comunal del PH y una de las piezas importantes del PODEMOS, la que concilia muchas de las posturas divergentes. Qué cansador es eso de oir posturas tan diferentes e intentar llegar a acuerdos que beneficien a todos, pero principalmente, que estén de acuerdo a las promesas que hacemos a la gente, al pueblo. Sonó proselitista, un lugar común, pero de verdad que creo en la necesidad de que alguien asuma como propia la defensa por los derechos ciudadanos de muchos que no son escuchados. Me encantaría hacerlo, pero no sé si doy la talla.

Hablaba en una reunión del PODEMOS con el amiguín Salinas... preocupado él sobre cómo se hace para presentar ciertas situaciones a la sociedad sin que esta mal entienda las cosas... Si yo lo supiera, compañero Salinas, entendería por qué sentí que mis horas se perdían, por qué creí que no había generado suficiente interés para una segunda parte, mientras escucho perpeja que Pedro Luis repite un "ella ni me pesca"... Yo, que hasta le dije a Albertito y a algunas integrantes de la tribu que quería que me llamara... aunque me duró sólo un día...

Estupefacta seguiré por la vida, sin entender de qué se trata el tema de las relaciones humanas... las conductas sociales me parecen música docta escrita en japonés, tocada en esperanto y que se oye sólo en código binario... es decir... hoy no entiendo nada de nada...

Mía